Microlaringoscopia directa y escisión de la lesión de las cuerdas vocales
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Este video presenta una escisión quirúrgica detallada de un granuloma de las cuerdas vocales en un paciente con cirugías laríngeas previas. Después de un tratamiento conservador infructuoso con inhibidores de la bomba de protones y esteroides inhalados, la lesión se extirpó endoscópicamente. Se hace hincapié en la exposición, la manipulación de instrumentos y la preservación del tejido para evitar daños en el cartílago. La hemostasia se logra con promesas de epinefrina y se describe la terapia de voz postoperatoria. El procedimiento destaca consideraciones técnicas clave y estrategias de colaboración esenciales para el manejo eficaz de los granulomas laríngeos.
Los granulomas laríngeos son lesiones benignas no neoplásicas, localizadas principalmente en el tercio posterior de las cuerdas vocales, particularmente en el proceso vocal o en la región aritenoides.1 Estas lesiones a menudo surgen como complicaciones del abuso vocal (33%), enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) (30%), traumatismo laríngeo externo o como resultado de una intubación endotraqueal previa (23%).2 Los granulomas laríngeos se presentan con signos y síntomas clínicos que incluyen disfonía, ronquera, malestar o dolor en la garganta y disnea. En particular, el granuloma vocal, a pesar de su nombre, patológicamente no es un verdadero proceso granulomatoso. En cambio, se caracteriza como un proceso reactivo/reparador en el que el epitelio escamoso intacto o ulcerado está cubierto por tejido de granulación o fibrosis. Aunque los granulomas suelen ser de naturaleza benigna, a menudo requieren tratamiento quirúrgico. Otras opciones de tratamiento incluyen inhibidores de la bomba de protones (IBP) e inhalaciones de esteroides, inyección de neurotoxina botulínica y fonoterapia. Casi la mitad de los casos generalmente remiten a través del manejo clínico que involucra IBP, esteroides inhalantes tópicos y fonoterapia. Además, la extirpación quirúrgica del granuloma, cuando se combina con el manejo clínico, demostró ser efectiva en el 90% de los casos.4
Este paciente se sometió a una terapia conservadora inicial con IBP y esteroides inhalados, que no resultó en remisión. Se tomó la decisión de proceder a la extirpación quirúrgica de la lesión después de obtener el consentimiento informado del paciente.
Este video ilustra los pasos tomados para lograr resultados óptimos durante la escisión quirúrgica del granuloma de las cuerdas vocales. En este caso clínico, el paciente había sido sometido a dos intervenciones quirúrgicas previas, lo que resultó en la formación del granuloma.
La parte inicial del video se centra en posicionar el tubo endoscópico anteriormente, facilitando la visualización del granuloma y su separación distinta de las estructuras cartilaginosas, específicamente el aritenoides. Se enfatizan las medidas de protección, incluido un protector bucal y un posicionamiento específico del paciente, por seguridad. El laringoscopio se fija de forma segura a un soporte de Mayo colocado sobre el pecho del paciente, lo que garantiza la estabilidad y un posicionamiento óptimo para el equipo quirúrgico. Para mejorar la ergonomía y la precisión, el operador emplea técnicas específicas. El apoyo del codo y la estabilización de la mano izquierda de la mano derecha en la entrada del laringoscopio pueden proporcionar estabilidad durante el procedimiento.
En fases posteriores, el granuloma se dirige a la escisión con una cuidadosa consideración de su ubicación anatómica. El enfoque meticuloso implica navegar por debajo del granuloma para evitar la exposición involuntaria del cartílago o pericondrio circundante. Se reconocen las observaciones sobre el manejo de los instrumentos y las posibles obstrucciones, y se realizan ajustes para garantizar la movilidad sin restricciones de los instrumentos. El compromiso del cirujano de proporcionar un espacio adecuado para el asistente es evidente, enfatizando la naturaleza colaborativa del equipo quirúrgico. Minimizar las posibles complicaciones relacionadas con el enredo de instrumentos es crucial.
Los pasos adicionales implican identificar una unión precisa entre el granuloma y los tejidos sanos. Se observa un pliegue mucoso menor y una ligera hinchazón en el área designada. La succión juega un papel crucial para garantizar una visibilidad óptima y ayuda en el proceso de escisión preciso y cuidadoso. Se consideran técnicas alternativas, como insertar tijeras debajo del granuloma para elevarlo. Además, si la lesión es sésil, la infiltración submucosa con un anestésico local combinado con un vasoconstrictor en la base de la lesión puede ayudar en la disección y la hemostasia.
El cirujano selecciona las tijeras adecuadas, guiando al asistente en la extirpación hábil del granuloma mientras mantiene el control sobre el tejido circundante. Después de una extracción exitosa, la hemostasia se logra aplicando tópicamente un plegario de epinefrina, presionado cuidadosamente sobre el área sangrante. El técnico quirúrgico manipula la muestra, usando una aguja para extraerla de las pinzas para el examen de patología.
A medida que el procedimiento llega a su fin, el cirujano evalúa la representación visual en la pantalla, lo que garantiza un campo operatorio claro.
Se destaca la importancia de la terapia de la voz, incluido el descanso vocal y la terapia del habla después de la operación. Se requerirá que el paciente se abstenga de hablar durante 1 semana. Posteriormente, se le indica que comience a hablar durante breves intervalos según sea necesario, empleando un volumen suficiente para ser escuchado por un individuo sentado a su lado. Se deben evitar tanto los gritos como los susurros para evitar la estimulación agresiva de las cuerdas vocales.3
En conclusión, este video proporciona una narrativa detallada de esta intervención quirúrgica, que abarca los matices del procedimiento, la toma de decisiones colaborativa y las consideraciones de atención postoperatoria.
El Dr. Scott Brown se desempeña como editor de sección en JOMI y no ha participado en el procesamiento editorial de este artículo.
El paciente al que se hace referencia en este artículo de video ha dado su consentimiento informado para ser filmado y es consciente de que la información y las imágenes se publicarán en línea.
Resumen agregado después de la publicación el 19/07/2025 para cumplir con los requisitos de indexación y accesibilidad. No se realizaron cambios en el contenido del artículo.
References
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- Rubin AD, Praneetvatakul V, Gherson S, Moyer CA, Sataloff RT. Hiperfunción laríngea durante el susurro: ¿realidad o mito? J Voz. 2006; 20(1). doi:10.1016/j.jvoice.2004.10.007.
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Cite this article
Cohen SM, Brown CS. Microlaringoscopia directa y escisión de la lesión de las cuerdas vocales. J Med Insight. 2024; 2024(276). doi:10.24296/jomi/276.